A MANERA DE DIÁLOGO
SOCRÁTICO
-Estudiante: -Perdone que interrumpa sus reflexiones,
pero tengo varias preguntas que formularle. No sé si podría…
-Profesor: -¡Vamos!, ¡vamos!, no te avergüences. Me da gusto verte, y si en algo puede servirte mi opinión con todo gusto
te ayudaré. Dime ¿qué es lo que deseas
saber?
-Estudiante: Precisamente mi duda es en relación
con las preguntas.
Tengo una serie
de interrogantes…
-Profesor: -Ya sé, sin duda no se trata de las
preguntas de los cuestionarios, sino de aquellas
que se plantean con fines didácticos. Las dudas que puedas tener sobre ese aspecto son muy comunes entre
los que estudian para profesor e incluso entre docentes
en servicio.
-Estudiante: -No cabe duda que nos conoce muy bien a
todos. Antes que nada, no me convence mucho la idea de que las preguntas
sean una técnica
de enseñanza.
-Profesor: -Bueno, contéstame tú mismo: si
formulas dos o tres preguntas durante la clase, ¿aplicas
por ello automáticamente la técnica
interrogativa
-Estudiante: -Desde luego que no; lo más seguro es que
esté utilizando otra técnica cualquiera.
-Profesor: -Veamos otra situación. Si expones un tema
polémico, por ejemplo, los derechos
reales de la población a la igualdad, y planteas, una a una, una serie de preguntas que conducen a la
discusión y a la obtención de ciertas conclusiones,
¿estamos ante un caso de técnica interrogativa?
-Estudiante: -Creo que tampoco. Tiene las características de la discusión, la cual se basa
en cuestionamientos.
-Profesor: -Bien. Si después de que tres alumnos
han presentado diferentes aspectos de
un tema, digamos, de las causas de la emigración, el resto del grupo debate la problemática correspondiente por medio de preguntas
y de respuestas, dime, ¿se está
utilizando la técnica que analizamos?
-Estudiante: -Definitivamente, no. Me parece que se
trata, más bien, de la técnica de foro.
-Profesor: -Tienes razón en la primera parte de tu
respuesta, pero no en la segunda. Esta
técnica es la del panel. Después de hacer este breve repaso, dime si por el simple hecho de que se formulen
preguntas en el curso se está aplicando la técnica interrogativa.
-Estudiante: -Parece más lógico contestar que no, ya
que muchas técnicas incluyen las preguntas, ya sea que
éstas provengan de los alumnos o
del educador.
-Profesor: -¿Crees que estamos como al principio de
nuestra conversación o que nos acercamos
a la respuesta?
-Estudiante: -Pienso que hemos avanzado, pero aún no
podría decir si pienso hay una técnica llamada
interrogativa, aunque me inclinaría a decir
que no existe tal.
-Profesor: -¿Qué nombre se le ha dado a la enseñanza
que propicia que los mismos alumnos vayan encontrando o estructurando por su cuenta los conocimientos?
-Estudiante: -Según recuerdo,
usted le llamó aprendizaje por descubrimiento.
-Profesor: -¿En qué está basado dicho aprendizaje?
¿Qué papel desempeñan en él las preguntas?
-Estudiante: -Parece que se basa en el hecho de que los
alumnos vayan deduciendo las respuestas
o los aprendizajes, aprovechando lo que ya sabían y lo que se les da a conocer en ese momento. Me
imagino, además, que las preguntas guían
la secuencia de los razonamientos y son formuladas principalmente por el
profesor.
-Profesor: -¡Muy bien! Ahora dime, ¿crees que el
aprendizaje por descubrimiento sea algo
nuevo?
-Estudiante: -No lo sé exactamente, pero supongo que sí.
-Profesor: -Te equivocas
rotundamente esta vez. Aunque el nombre y la sistematización del aprendizaje por descubrimiento son recientes, su antecedente
se remonta a la antigüedad clásica, concretamente a Sócrates. El sistema que él utilizaba ha sido
llamado método dialogado o mayéutica,
y consiste en guiar al alumno por medio de una serie de preguntas
a las que responde, una tras otra, hasta obtener o aceptar la conclusión adecuada.
-Estudiante: -Entonces ese método es muy antiguo. Según
parece, el profesor debe conocer muy
bien los razonamientos y las preguntas que conducen a la conclusión deseada y trabajar
únicamente con un alumno
por vez.
-Profesor: -Es correcta tu apreciación de que el profesor debe saber formular
muy bien las cuestiones; pero, en verdad,
¿este método sólo sirve para la enseñanza individual? Piénsalo bien; en otra ocasión lo discutiremos porque
ya debo iniciar mi clase. ¡Hasta luego!
-Estudiante: -¡Gracias, profesor! Creo que debo leer
los Diálogos de Platón y profundizar mis conocimientos sobre la mayéutica
y el aprendizaje por descubrimiento.
Bibliografía
Mendoza Núñez Alejandro, Las preguntas
en la escuela, como estrategia didáctica, México, Trillas,
2007, Pág.13-16.